miércoles, 22 de abril de 2015

El Síndrome de burnout

En determinadas ocasiones el cuidado de los pequeños puede resultar agotador. El día a día de muchas mamás y papás puede ser complicado: atender a las necesidades de los hijos, hacer frente a sus rabietas, a niños nerviosos, los deberes, etc… Llevar una casa, y atender las obligaciones laborales… puede conllevar alteraciones en el bienestar de las madres y padres y provocar lo que se conoce como síndrome de burnout.

El Síndrome de burnout.

El síndrome de burnout, es el síndrome del cuidador quemado. Se produce cuando los papás y/o mamás experimentan una sobrecarga. El síndrome de burnout se manifiesta cuando apaece la sensación de no tener tiempo para uno mismo, de no disponer de un segundo ni para ir al baño solo, enfados frecuentes, ganas de llorar,….

El síndrome de burnout ocurre cuando una persona está sometida a un estrés constante y continuado, sus consecuencias pueden ser muy perjudiciales para el bienestar físico y psíquico del cuidador, así como para el de la familia.

Es fundamental prestar atención a los síntomas del síndrome de burnout para poder hacerle frente y evitar así sus efectos negativos.

“Los niños y niñas no necesitan madres y padres perfectos, si madres y padres que les contagien bienestar.”

Síntomas del síndrome de burnout.

Los síntomas que pueden alertarnos de la presencia del síndrome de burnout o sobrecarga de los padres, son los siguientes:


  • Actitud indiferente y negativa: perdida de interés por las actividades favoritas.
  • Aislamiento social.
  • Enfermedades frecuentes y dolor crónico.
  • Dificultad para concentrarse.
  • Cambios en los patrones del sueño.
  • Cambios en el apetito y en el peso.
  • Sentimientos en el apetito y en el peso.
  • Consumo inadecuado de alcohol y/o medicamentos.
  • Sentimientos de desesperación, impotencia.
  • Estrés, ansiedad, intensos.
  • Ganas de llorar sin razón aparente.
    ¿Por qué se produce el síndrome de burnout?


El síndrome de burnout, se caracteriza por la sobrecarga y tiene como consecuencia lo que comúnmente llamamosestar quemado. Cuando una persona se sobrecarga por encima de sus posibilidades (posibilidades normales de cualquier persona), aparece la respuesta de estrés. Cuando estamos demasiado tiempo sometidos a estrés y al cansancio, surge el agotamiento y nuestra mente y nuestro cuerpo se niegan a continuar. El síndrome son las respuestas del cuerpo que nos dice “para, necesitas descansar”.

El síndrome de burnout, sin el tratamiento adecuado puede interferir en el día a día de los afectados, impidiendo que lleguen a desenvolverse de una manera adecuada.

¿Qué podemos hacer ante el síndrome de burnout?

Por suerte, el síndrome de burnout puede evitarse sin demasiadas complicaciones y puede tratarse para una rápida recuperación. Veamos algunas recomendaciones para evitar sentirnos quemados, para prevenir y tratar el síndrome de burnout.

Ante cualquier síntoma consulta a un especialista y/o el médico, para que pueda apórtate el tratamiento más adecuado.

Aprende a gestionar tu tiempo y a organizar tus tareas. En muchas ocasiones una falta de organización es la causa del agotamiento.

Pide ayuda a familiares y amigos.

Cuando lo necesites delega en otras personas funciones relacionadas con el cuidado de tus hijos. Son muchos los familiares a los que seguro que puedes recurrir y estarán encantados de ocuparse de los niños durante un rato.

Procura llevar un estilo de vida saludable que ayude a combatir y prevenir el estrés: ejercicio, rutina de sueño, alimentación, etc.

Dedica un tiempo para ti misma/o. Es bueno tener un tiempo para uno mismo, que nos permita desconectar y centrarnos en nosotros mismos. Puedes dedicarlo a un hobbie, vida social, etc.

Aprende a decir no y respeta tus límites para que los demás los respeten.

Busca alguna actividad relajante e introdúcela como rutina en tu día a día: meditación, yoga, leer un libro, charlar, etc.

Celia Rodríguez Ruiz

Psicóloga y Pedagoga

martes, 21 de abril de 2015

Cuando los chicos muerden y pegan (hasta los 2 años)

Mientras son bebés, el morder se explica en relación a la importancia que tiene a esta edad la zona oral:Los chicos se alimentan, conocen y disfrutan al llevarse a la boca los objetos y, durante esta etapa, también al morderlos. Si bien hay que señalarles claramente que no se debe morder, no hay que enojarse ni retarlos ni mucho menos darles discursos que no comprenderían.
Cuando son más grandecitos –entre el año y los dos años-, puede aparecer el gesto de pegar o el hábito de morder a sus padres, hermanos y/o compañeritos del jardín maternal con una intención más agresiva, pero siempre enmarcada en la necesidad del niño de comunicar sus sentimientos y de no encontrar otra manera para hacerlo. Pueden estar molestos porque tienen sueño y justo en ese momento ocurre algo que los perturba, entonces reaccionan como pueden.
La pelea por un juguete o la rabieta frente a un permiso que se les niega puede motivar el mordisco o el golpe. Pero hay que tener claro que los chicos que muerden o pegan no son "malos", sí necesitan que sus padres y maestros les vayan enseñando a resolver sus necesidades y a concretar sus deseos de formas no violentas.
Sacarlos de la escena de juego y hacerlos pedir perdón –aunque a los dos años sea nada más que un acto repetitivo, en algún momento hay que empezar, y bien puede ser ahora- , así como felicitarlos cuando prestan y comparten juguetes o cuando –con ayuda- logran evitar la agresión, son algunas de las posibilidades a la hora de formar hijos no-violentos.
En todo momento –y especialmente a esta edad- es importante que los padres sean consecuentes con sus acciones y no les peguen a sus hijos ni siquiera un chirlo en la cola o en la mano, porque si no el mensaje sería contradictorio y los chicos van a hacer lo que ven hacer y no lo que se les dice que hay que hacer.
Por otra parte, hay que señalar que, aunque es normal que en esta etapa los niños peguen y muerdan de vez en cuando, no todos lo hacen. Y que si se vuelve una actitud muy frecuente que los padres no pueden controlar y que les preocupa, siempre contiene recurrir a la orientación de un profesional.

lunes, 13 de abril de 2015

¿Cuánto Acido Fólico debería estar tomando?

El ácido fólico es una sustancia presente en muchos alimentos y se ha visto que en determinadas regiones del mundo en las cuales hay un déficit de ácido fólico en la dieta, como por ejemplo algunas zonas de Inglaterra, existe un aumento en el riesgo de malformaciones en el sistema nervioso - por ejemplo la Espina Bífida o el Mielomeningocele-, y también se ha visto que la administración de ácido fólico en la dieta previene este tipo de malformaciones.
Por ese motivo es conveniente la administración del mismo en toda mujer que esté buscando un embarazo, y el ácido fólico debe ser tomado antes que se produzca el embarazo y continuar con la ingesta hasta alrededor del tercer mes de gestación. La dosis recomendable de ácido fólico para prevenir los problemas de cierre del tubo neural son de alrededor de 1mg por día, salvo que la mujer haya tenido un bebé con algún problema de este índole, en cuyo caso la dosis que se recomienda es mayor, alrededor de 5mg por día.
Una dieta rica en ácido fólico ayuda a prevenir malformaciones en el sistema nervioso del bebé, por eso, se considera que es conveniente consumir esta vitamina cuando se está buscando un embarazo y durante los primeros tres meses de gestación. Como es muy difícil suplir esta necesidad sólo con las comidas, se recomienda un suplemento en estas etapas de 0,4 mg (400 microgramos) de ácido fólico por día o de 4 mg por día en el caso de mujeres con antecedentes de hijos con malformaciones del tubo neural.

Ácido fólico: ¿qué alimentos y en qué cantidades lo contienen?


AlimentoMicrogramos* de Acido Fólico
Lentejas (1 taza)362
Maní (1 taza)336
Semillas de Girasol (1 taza)308
Gérmen de Trigo (1 taza)280
Garbanzos (1 taza)275
Espinaca hervida (1 taza)262,8
Espárragos (1 taza)262,8
Porotos Negros (1 taza)253
Hígado (100 gr)217
Avellanas (1 taza)147
Lechuga (10 hojas oscuras)136
Arvejas frescas (1 taza)100
Palta en cubos (1 taza)93
Brócoli (1 taza)80
Jugo de naranjas (1 taza)75
Choclo dulce en rodajas  (1 taza)73,6
Porotos de Soja (1 taza)72
Huevo (2 unidades)47
Almendras (1 taza)40,6
Banana en rodajas (1 taza)30
Naranjas (1 unidad chica)30
Pomelo en cubos (1 taza)28,8
Melón en cubos (1 taza)27,2
Tomate en cubos (1 taza)27
Zanahoria cruda en rodajas (1 taza)18,2
Ananá en cubos (1 taza)16,5
*1 miligramo= 1000 microgramos
Fuente: http://www.planetamama.com.ar/nota/acido-f%C3%B3lico-%C2%BFqu%C3%A9-alimentos-y-en-qu%C3%A9-cantidades-lo-contienen?page=0,1

martes, 7 de abril de 2015

Lo que no se puede hacer durante el embarazo


  • . No tomar baños de inmersión a temperatura muy elevada, o termales, ni utilizar saunas o baños de vapor. El problema es la temperatura del agua, no la inmersión. Un baño de inmersión casero, con agua templada (entre los 24 y 26 grados centígrados por ejemplo), no representa ningún peligro, en cambio, la inmersión en aguas por encima de los 36 grados centígrados puede ser perjudicial para el aparato circulatorio de la embarazada y por ende para el bebé, durante los 9 meses de gestación.
  • Si hay mascotas en el hogar, evitar el contacto directo con las heces. En el caso de las heces de los gatos, hay que tener especial cuidado para evitar la toxoplasmosis.
  • Evitá realizar tareas de jardinería y estar en contacto directo con la tierra (abono), para evitar también la toxoplasmosis. 
  • Evitá comer pescado crudo y otras carnes crudas o poco cocidas o preparaciones que las contengan como el sushi, el carpaccio, etc. Lavá muy bien las verduras.
  • Si fumás, llegó el momento de dejar el cigarrillo. El cigarrillo durante el embarazo aumenta los riesgos de: pérdida de embarazo, embarazo ectópico (cuando el embrión se implanta fuera del útero), placenta previa, desprendimiento prematuro de placenta, parto prematuro, que el bebé nazca con bajo peso y con deficiencias respiratorias.
  • No ingieras alcohol. El alcohol que ingerís llega rápidamente a tu bebé. Si tomás alcohol durante el embarazo aumentás los riesgos de que tu bebé de nazca con retraso mental, retraso de crecimiento, defectos en el corazón y malformaciones faciales.
  • Nunca consumas drogas. El uso de la marihuana se asocia a retardo de crecimiento fetal intrauterino, partos prematuros, sufrimiento fetal. Cuando se emplean altas dosis y se usa asociada a alucinógenos, cocaína, tabaco y alcohol puede causar malformaciones en el bebé. La embarazada debe respetar el derecho de su hijo a nacer sano y sin discapacidades por lo tanto debe suspender el consumo de todo tipo de drogas durante la gestación.
  • No tomes medicamentos sin antes consultar con tu médico.
  • Tratá de ingerir menos cafeína. Altas concentraciones de cafeína pueden contribuir a que tu bebé nazca con bajo peso. Si tomás café podés adoptar el de tipo descafeinado o el de malta. De todos modos 1 ó 2 tazas de café por día serán inofensivas.
Fuente: http://www.planetamama.com.ar/nota/lo-que-no-se-puede-hacer-durante-el-embarazo?page=full

miércoles, 1 de abril de 2015

¿Se pueden tomar gaseosas bajas calorías y edulcorante en el embarazo?

El aspartame, que es el edulcorante que se utiliza en la mayoría de las gaseosas y endulzantes sustitutos del azúcar, no presenta riesgos para el bebé si no se consume en forma excesiva; excepto para las embarazadas que sufren de fenilcetonuria (enfermedad metabólica hereditaria).
Un sobrecito de aspartame cada tanto, o una botellita de gaseosa, no deberían ser motivo de preocupación. Es importante que la cantidad de gaseosa que se consuma no reemplace la ingesta de agua, más saludable para el embarazo (aproximadamente 2 litros por día).
El consumo de sacarina y de ciclamato (otros tipos de edulcorantes) durante el embarazo está cuestionado, ya que distintos estudios realizados en ratones demostraron que pueden atravesar la placenta pudiendo causar defectos en el feto.
Fuente: http://www.planetamama.com.ar/preguntafrecuente/%C2%BFse-pueden-tomar-gaseosas-bajas-calor%C3%AD-y-edulcorante-en-el-embarazo